Gonzalo Cruzat Valdés
Abogado
Es curioso lo que ocurre en relación al señor Eliodoro Matte. Tanta rabia en torno a la colusión de las papeleras, o al apellido, o lo que fuera.
Pero no hay que confundirse. Una cosa es CMPC, compañía, otra es la familia controladora. Como presidente de la compañía, asumió el error. Deja el directorio, pide perdón y, en entrevista al diario “El Mercurio”, sostiene que enmendará el daño ejemplarmente. Esperemos todos que esto se traduzca en hechos concretos.
Todo lo anterior es destacable. No recuerdo que en temas de libre competencia alguien haya hecho a título personal lo que este señor hizo a nombre de quienes él representa. Por el contrario, la negación es lo habitual.
Ahora bien, en cuanto a la compañía CMPC, lo ocurrido es pernicioso, más en un mercado delicado como el de la celulosa, desde la óptica de la competencia. Un estudio a requerimiento de la Fiscalía Nacional Económica del año 2009 ya daba luces de lo poco competitivo de aquel mercado. Estamos, además, en presencia de un mercado con participaciones cruzadas, toda vez que un director de CMPC lo es también en otra relacionada con su competidor, con los riesgos que ello implica. Si miramos a los Estados Unidos, esto no sería posible allá.
Este caso es nocivo, qué duda cabe. Pero si se es proactivo, se adoptan decisiones en pos de mercados competitivos y se indemnizan daños, puede transformarse en uno ejemplar.
Fuente: ElMercurio
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21 Nov 2024