Durante el trimestre julio-septiembre el incremento de deudores creció el 1,9%, la concentración se asentó en el rango de 30 a 44 años.
El monto promedio de mora llegó a los $2.072.012 durante el trimestre julio-septiembre (3,2% más que el trimestre anterior).
Esta situación sería el mayor incremento desde diciembre de 2020, cuando subió un 4,2%, en periodos de pandemia, en que la economía sufrió graves golpes.
Pese a lo anterior, esto representa a su vez una disminución del 0,6% anual. Sin embargo, son todos los grupos socioeconómicos aumentaros sus moras promedio, excepto el ABC1.
El grupo de mayor ingreso se considera por ingresos de $3.115.807, aunque el grupo anterior posee la mayor mora promedio llegando casi a los $5 millones de pesos.
La deuda morosa total también evidenció un alza, llegando a US$9.343 millones, lo que corresponde a una variación real trimestral de 5,2% y real anual de 1,2%.
La cifra supera incluso los aumentos que se dieron en pandemia, donde llegaron a un 3,4%, específicamente en diciembre de 2020.
La mora promedio alcanzó los $2.072.012, un 3,2% más que el trimestre anterior. Este es el mayor incremento desde diciembre de 2020, cuando subió un 4,2%.
Finalmente, también se registró un alza en la morosidad intermitente, es decir, personas que entran y salen del grupo de morosidad permanente.
Los morosos permanentes (moras por 12 meses o más) continúan agrupando a más del 70% del total de personas con deudas impagas en Chile, pero su participación en un año ha caído 1,5 puntos porcentuales (p.p.).
Por su parte, los morosos intermitentes (quienes tienen al menos una deuda publicada en los últimos 12 meses) crecieron hasta llegar a un 21,9%, lo que representa un incremento de 3 p.p. en un año.
La participación de los nuevos morosos (aquellos sin deudas impagas en periodos previos de medición) disminuyó un 1,4 p.p. anual.
