Los vehículos nuevos deberán venderse con el grabado, mientras que los usados tendrán 12 meses para realizar la modificación.
La medida fue tomada por la autoridad con fin de reducir la reventa de piezas en el comercio ilegal.
El viernes pasado, el 1 de septiembre, el gobierno promulgó esta modificación a la Ley del Tránsito, cuyo fin es reducir la venta de piezas robadas.
La medida obligará a los dueños de vehículos a grabar sus patentes en ventanas y espejos, incluyendo letras y números.
Asimismo, la medida ayudará la detección de vehículos clonados, cuyas placas patentes no coincidan con el registro del vehículo.
Hoy el mercado ofrece opciones para el grabado, desde láser, ácido o cuarzo.
Desde la autoridad de transportes aseguran que los materiales o tipos de grabados serán regulados por la cartera.
De esta manera, a partir de marzo del 2024, la implementación de loa medida será completada, teniendo toda la flota automotriz con las patentes grabadas.
Las sanciones para los vehículos que no cumplan es de 1,0 a 1,5 UTM, correspondiendo a $63.000 a $95.000 pesos.
Para Conadecus, asignar la responsabilidad de las medidas disuasorias de robos a los consumidores no es la solución.
“Nuevamente es el consumidor quién tiene que pagar por los altos índices de robos automotrices, esa es una responsabilidad de la autoridad y las policías”, dice Hernán Calderón, presidente de la asociación.
