Aunque México es el país con mayores índices de obesidad en América Latina, no hay ningún tipo de advertencia en los alimentos hipercalóricos para alertar a los consumidores sobre cuáles son los productos que propician el sobrepeso, como sí existe en Chile.
La mayoría de los chilenos entrevistados por Excélsior, quienes desde hace cuatro meses se encuentran con esta advertencia en todas las envolturas de alimentos, contestaron que es imposible comer igual y que con esa información hasta han dejado de comprar
comida chatarra.
Es insoportable, ya no se puede comer en paz”, respondió Josefina, en tono de broma, al cuestionarla al respecto, y mucho menos, porque ella siempre ha estado preocupada por conservar un buen peso.
En Chile, desde el 27 de junio pasado entró en vigor la Ley de Etiquetado de Alimentos. Esta nueva norma somete de manera obligatoria a rotular ALTO EN… a todos los alimentos que posean valores mayores de 275 calorías, 400 gramos de sodio, diez gramos de azúcares totales y cuatro gramos de grasas saturadas en cada cien gramos, de acuerdo con los estándares establecidos.
Esta nueva norma somete de manera obligatoria a rotular ALTO EN… a todos los alimentos que posean valores mayores de 275 calorías
Este país contó con la ayuda de la comunidad científica y de la Organización Panamericana de la Salud para validar, con base científica, los umbrales de sodio, azúcar, grasas y calorías sobre los que los alimentos deberían llevar una advertencia en su etiquetado en el caso de superarlos.
Con este rótulo, todos los consumidores, sin necesidad de irse a buscar entre las letras chiquitas de las tablas alimenticias o sin estudios previos de nutrición, descubren de forma sencilla y rápida cuál es la comida que propicia la obesidad, porque muchas veces alimentos que cualquiera podría considerar como saludables rebasan los estándares de azúcares o calorías, como los cereales.
Hace diez años, el senador chileno de la Comisión de Salud, Guido Girardi Lavín, comenzó una guerra en contra de la industria alimentaria que se negaba a ceder ante esta propuesta de advertir a la población de manera clara y fácil los valores que consumen en su dieta.
El derecho a saber es fundamental para que la gente pueda saber lo que come y tomar decisiones informadas para alcanzar una dieta saludable”, decía el senador en la sede de la FAO, al presentar esta legislación, la cual ha llamado la atención de todo el mundo por lo novedosa.
El principal impulso de esta ley fueron los altos índices de obesidad infantil y diabetes que existen en Chile. Este país suramericano es el cuarto con mayor obesidad en Latinoamérica, de acuerdo con la OMS. El 29.1% de su población padece este mal y 20% de los niños menores de seis años.
Mientras que en México, que ocupa el primer lugar de la región por los altos índices de obesidad, con 32.8% de su población afectada, aún no existe una normatividad que obligue a la industria alimentaria a especificar en sus etiquetas cuando superen los estándares de calorías, azúcares, sodio y grasas.
En Chile, además aquellos alimentos que contengan la categorización de ALTO EN… queda prohibida su publicidad dirigida a menores de 14 años o cualquier gancho publicitario que atraiga la atención o interés de los menores, como pegatinas, adhesivos y/o caricaturas y prohíbe su venta en establecimientos educativos.
Fuente: Excelsior