Se acerca marzo y los estudiantes empezarán un nuevo año escolar, en que uniformes, útiles y libros pesan en el presupuesto familiar.
Sin duda en el mes más difícil del año, el mes de marzo, se acerca rápidamente, mientras madres, padres y apoderados aún resienten los gastos del verano.
¿Por qué es el mes más difícil? Esto debido a la gran cantidad de pagos que se realizan en estos meses, junto con el año escolar, pago de patentes y permisos de circulación.
Desde Conadecus siempre recomendamos a los apoderados que puedan reutilizar uniformes y libros para ahorrar un poco, pero el consejo más importante es a cotizar y comparar precios.
Para Hernán Calderón, presidente de Conadecus la recomendación es simple, comprar lo justo y necesario, “Muchos hogares no están en condiciones de adquirir uniformes, los precios están elevadísimos, uniformes y útiles escolares han aumentado sus precios en forma significativa y una inflación que no da tregua”, asegura.
En caso de ser necesario, los préstamos por solicitar, deben ser cotizados en los distintos prestadores de servicios, manejar la mayor cantidad de información y poner especial atención a la cantidad de cuotas que se pacten con el prestador, y así, disminuir los intereses.
Para las personas que ya arrastran deudas de grandes montos el llamado es priorizar los pagos según lo permita los ingresos, complicando aún más los bolsillos de las personas más vulnerables.
Un consumidor informado hace valer sus derechos: negar la educación a niños y niñas de todo el país por el incumplimiento total o parcial de los útiles escolares, porte de libros o uso del uniforme, resulta inaceptable.
No solo es inaceptable, sino también ilegal, atentando contra los derechos del consumidor escolar y a la ley de acceso a la educación.
“Desde Conadecus hacemos el llamado a reutilizar útiles y libros escolares de años anteriores, teniendo un consumo más responsable y que signifique un alivio para los bolsillos de todos los apoderados”, asegura Calderón, presidente de Conadecus.
