Hasta penas de cárcel arriesgan las personas que roben contraseñas o información confidencial de sitios web con ingreso público. Conceptos como “ataque a la integridad” o “receptación de datos confidenciales ajenos”, son algunos de los conceptos que perseguirá, a partir de hoy, el poder judicial.
Esta modernización de la normativa antes vigente comienza junto con su publicación en el Diario Oficial, definiendo ocho nuevos tipos de ilícitos de carácter informático, aspectos novedosos y positivos sobre una normativa que antiguamente perseguía la pérdida de bienes físicos, ya sea un celular o un computador, ahora persigue también la pérdida de información sensible para los usuarios.
Entre otras medidas, la ley ahora protege las contraseñas, tipificado como “acceso indebido” a las personas que ingresen forzosamente a cuentas ajenas, el temido hacker será más observado por la justicia que hoy tiene más herramientas para perseguir el abuso de los dispositivos, también la receptación, fraude, ataques, falsificación e incluso, la intercepción de datos.
Si bien, la ley no protege la intimidad de nuestro celulares si contempla el uso de nuestros datos, tales como dirección, bancarización, trabajo o incluso, aspectos personales como los hábitos de consumo. Por otro lado, la ley también protege de intenciones maliciosas, es decir si una persona se organiza con muchas otras para afectar el correcto funcionamiento de un servidor cae en la categoría de abusar de un dispositivo.
Los datos de todos los chilenos y chilenas son una preocupación en base a esta nueva ley que permitirá sentirnos más seguros con nuestra información en el mundo intangible de la tecnología. Esta normativa se apega al a las exigencias del Convenio sobre la Ciberdelincuencia del Consejo de Europa, conocido como “Convenio de Budapest”, del que Chile es parte, exponiendo los esfuerzos para dar un tratamiento más comprensivo en el contexto en que se cometen estos ilícitos y así mitigar la carencia de medios suficientes para la investigación, persecución y sentencia de estos delitos.
La ciberseguridad llega a tocar las puertas de los usuarios, respondiendo siempre a las recomendaciones de los expertos de proteger nuestras información frente a la comodidad que nos otorgan los dispositivos móviles, nuevamente son punto de mira en que la delincuencia no se queda atrás y por tanto, tampoco la justicia.
