Los créditos bancarios para la vivienda representan el 35,8% de los ingresos disponibles, mientras los créditos bancarios de consumo significan 18,2% y los pasivos frente a otros intermediarios de crédito llegan al 14,2%.
Una nueva alza tuvo la deuda de los hogares, según las Cuentas Nacionales por Sector Institucional de 2016, divulgadas por el Banco Central.
Es así que los pasivos como porcentaje del ingreso disponible se elevó a 68,2%, aumentando 1,7 pp., aunque este es el menor incremento de los últimos años.
Al cierre de 2016, la deuda de hogares estaba constituida por créditos bancarios para la vivienda (35,8 pp.), créditos bancarios de consumo (18,2 pp.) y por pasivos frente a otros intermediarios de crédito (Casas comerciales, Compañías de seguros, Cajas de compensación, entre otros), que representaron 14,2 pp. del ingreso disponible.
En tanto, la tasa de ahorro de los hogares se mantuvo estable respecto a 2015, en 9,5% del ingreso, aunque mostró una trayectoria creciente dentro del año. Y es que el ingreso disponible bruto subió 6,9% anual, incidido principalmente por el comportamiento de las rentas provenientes de la producción, en particular, de las remuneraciones. Por su parte, las rentas de la propiedad explicaron 1,6 pp. del crecimiento del ingreso, determinadas por los retiros de utilidades.
Mientras, el consumo final de los hogares mostró un menor dinamismo respecto del ingreso disponible, creciendo 6,4% anual.
Por otro lado, los hogares redujeron su gasto de capital durante 2016, alcanzando una tasa de 6,0% del ingreso, inferior en 0,5 pp. a lo registrado un año antes. Esto, sumado al comportamiento estable del ahorro, permitió aumentar su capacidad de financiamiento en 0,3pp., respecto del año anterior, llegando a 5,1% del ingreso disponible.
Desde el punto de vista de las operaciones financieras, la mayor capacidad de financiamiento obedeció a una disminución de la contratación de préstamos, principalmente de largo plazo. Por el lado de los activos, se observó una mayor adquisición de cuotas de fondos, compensada por una disminución de las tenencias de efectivo y depósitos y de los aportes netos a los fondos de pensiones.
La riqueza financiera neta de los Hogares se situó en 187,4% del ingreso disponible, disminuyendo 4,0 pp. respecto del cierre del año anterior. Ello respondió, principalmente, a la caída en los saldos invertidos en Acciones y otras participaciones.
Fuente: Estrategia