Por Hernán Calderón Ruíz, Presidente de Conadecus
IVA Diferenciado: lo que Chile necesita
Implementar el IVA diferenciado, donde se incluya la canasta básica de alimentos, remedios, artículos escolares, libros, frutas y verduras, etc. beneficia directamente a los sectores de menos ingresos, además la clase media, de quienes precisamente todas las políticas sociales se olvidan, en tiempos en los alimentos suben sostenidamente, son los sectores medios los más golpeados, más que los de menos recursos, porque hay menos políticas sociales de ayuda que los beneficien.
La presidenta de Brasil ha anunciado una rebaja significativa del impuesto que pagan los consumidores finales en la canasta básica de alimentos. Esto significará una menor recaudación para el estado brasileño de US$ 3.750 millones. Esta medida tomada en Brasil es mejor que cualquier bono, como el anunciado en Chile, se hace efectiva al momento de hacer las compras y los consumidores la ven reflejada en el bolsillo inmediatamente, no está expuesto a la burocracia estatal, fichas de protección o condicionado a los que cobran familiar por su hijo u otros mecanismos que al final son trabas para no hacer efectiva la promesa.
En Conadecus hemos impulsado desde hace mucho tiempo la necesidad de instaurar un IVA diferenciado, por los beneficios que esta medida significaría para los consumidores. Chile es el único país de Sudamérica que tiene un IVA único.
Este debate se da con los economistas neoliberales, quienes sostienen que el IVA debe tener una tasa única para todos los productos y servicios. Según estos economistas no es posible porque sería de un alto costo controlar su aplicación y que además incentivaría la evasión, pero en la gran mayoría de los países europeos y latinoamericanos se aplica, porque medidas como esta son necesarias para acortar la brecha entre los ricos y los que tienen menos, en estos países no tienen dificultades para controlar las variables que atemorizan a los neoliberales.
Estas son las medidas que el dogmatismo económico de los neoliberales no acepta, a pesar de que estas medidas son las causantes de las desigualdades del modelo neoliberal. El país necesita medidas que alivien el bolsillo de quienes tienen menos y los ciudadanos de menores recursos.
Para graficar con más claridad lo que significa el IVA en un producto de primera necesidad, el pan con un promedio de consumo de 100 kg. anuales por persona según el INE, esto es tomado como dato estadístico, pero todos sabemos que en los sectores de menos ingresos este promedio es fácilmente superior en varias veces, en una familia normal chilena, que compre 1.5 kg. de pan diario a un precio de $800 kg., significa un IVA $191.5 diarios. Si esto lo multiplicamos por los 365 días del año, significa que son $69.897 solo en IVA al pan anuales. El estado por concepto de IVA al pan recauda aprox. 500 millones de dólares, el bono de $ 40.000 que propone el gobierno es menor a lo que paga una familia en IVA anual al comprar pan.
Implementar el IVA diferenciado, donde se incluya la canasta básica de alimentos, remedios, artículos escolares, libros, frutas y verduras, etc. beneficia directamente a los sectores de menos ingresos, además la clase media, de quienes precisamente todas las políticas sociales se olvidan, en tiempos en los alimentos suben sostenidamente, son los sectores medios los más golpeados, más que los de menos recursos, porque hay menos políticas sociales de ayuda que los beneficien.
El IVA diferenciado es el principio de la equidad de la que tanto hablamos, porque significa, que quienes utilizan la mayor parte de sus ingresos en cubrir sus necesidades básicas, paguen menos, y quienes consumen productos considerados un lujo, paguen más, porque comprar pan no es lo mismo que comprar un auto de lujo que paga el mismo impuesto que los alimentos básicos, porque es necesario un debate sin dogmatismos, es necesario pensar en los ciudadanos, consumidores o como quieran llamarnos los neoliberales.
