Las inquietudes de las organizaciones de consumidores ante nuevo rol que propone Bachelet

Las principales entidades del sector, Conadecus y Odecu, se refieren a la promesa de la Mandataria en el marco de la protección y defensa de los consumidores.
Una de las materias en que la Presidenta Michelle Bachelet puso mayor énfasis en la primera Cuenta Pública de su actual administración, fue para referirse a la dotación de facultades que se les otorgará a las asociaciones de consumidores “para cumplir de mejor forma su misión de proteger, informar y educar a los consumidores, así como asumir la representación y defensa de los derechos de sus afiliados”.
En este contexto, los líderes de las principales organizaciones que trabajan en la defensa de los consumidores en el país plantearon a Emol sus inquietudes y recomiendan cuáles serían las mejores soluciones para cumplir de manera más efectiva con su rol.
El presidente de la Organización de Consumidores y Usuarios de Chile (Odecu), Stefan Larenas, si bien admite que no conoce detalles de la propuesta del Ejecutivo, valora que la Jefa de Estado haya abordado la importancia que tiene la defensa del consumidor.
“El hecho que la Presidenta nos haya nombrado el día miércoles, es importante porque se entiende que la protección del consumidor no sólo la hace el Estado, sino que las organizaciones de consumidores tienen que cumplir su rol para formar un sistema de protección al consumidor”, señala el líder de la entidad.
No obstante, Larenas plantea que las mayores facultades que deberían recibir estas instituciones, guardan relación con un financiamiento que acompañe al de los fondos concursables, que les permita funcionar debidamente durante todo el año.
“Hay cosas que son elementales. Una organización de consumidores por ley no puede recibir subvención como una fundación. Por lo tanto, el Estado tiene que ayudar en su fortalecimiento, por lo menos en lo que se refiere a tener un subsidio básico, que permita las necesidades básicas como pagar la luz, tener una secretaria, internet, etcétera”, propone.
En esa línea, añade que los fondos concursables deben existir, pero en forma paralela a la formula que plantea. “No sacamos nada con tener un proyecto y no tener ningún lugar donde hacer el proyecto”, dice.
Conadecus y un financiamiento permanente
Un opinión similar es que la tiene el presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus), Hernán Calderón, quien aclara que “cuando se habla se fortalecer las organizaciones de consumidores no son más de las que tenemos hoy día, lo que hay un mejor financiamiento para que puedan cumplir mejor su rol”.
“Hoy las organizaciones de consumidores adolecen de un financiamiento permanente, solamente pueden postular a proyectos, los que se tiene que ejecutar. Y éstos no se pueden incorporar al gasto corriente que tiene todos los día una organización de consumidores, como son la luz, el agua, la secretaria, que son básicos para funcionar”, advierte.
Por ello, Calderón indica que “si hubiera un mecanismo que tuviera un financiamiento basal, sería un avance importante para las organizaciones de consumidores para desarrollar sus funciones. Porque el problema que tienen es que el año tiene entre seis y ocho meses. Hay cuatro meses -enero, febrero, marzo y abril- en que no tenemos financiamiento, entonces tenemos una dificultad económica siempre para enfrentarnos al mercado, a empresas con mucho patrimonio”.
Fortalecimiento del Sernac
En tanto, ambos líderes respaldan la idea del Gobierno de enviar un proyecto de ley que fortalezca al Sernac, aunque plantean reparos respecto a ciertas facultades que tendría el organismo.
“Nosotros compartimos eso de fortalecer al Sernac como dijo la Presidenta, pero claramente la propuesta que hay, de trasladar hoy día las facultades que tienen los Juzgados de Policía Local donde concurren los consumidores y traspasarselas al Sernac, no la compartimos, porque eso va a significar un debilitamiento de la protección del consumidor”, señala Calderón.
En ese sentido, asegura que “hoy día el Juzgado de Policía Local tiene virtudes y defectos, pero tiene virtudes que no las va a poder suplir un procedimiento administrativo, que en este caso haría el Sernac”.
En caso de que lo anterior sea aprobado en la ley, critica aún más que el organismo solo tenga oficinas regionales, lo que puede afectar a los consumidores que quieran realizar un denuncio, ya que en algunos casos “tendrían que recorrer grandes distancias para realizarla, no así si se hace en los Juzgado de Policía Local, que hay en prácticamente todas las comunas del país”.
Mientras que Larenas pide que el Servicio Nacional del Consumidor “debe estar en una institucionalidad nueva, es decir, debe tener una autonomía, pero mucho mayor a la que tiene ahora, porque hoy se mueve con los vaivenes de lo que es la contingencia política. Cambia el Gobierno y cambian las reglas de juego. La autonomía institucional es básica”.
Emol.com, 24 Mayo 2014
Foto de archivo de El Mercurio.