Hace ocho meses Conadecus acaparó varias planas de la prensa nacional por su consulta en la fusión LAN-TAM. En este caso y otros, hemos solicitado la participación a destacados profesionales voluntarios que han estado disponibles a colaborar ad-honorem con nuestra organización, para trabajar en favor de la protección de los consumidores ante los riesgos que enfrentan frente a la fusión de grandes empresas.
Lo anterior es un paso más en la larga batalla que continuamente damos en contra de aquellas fusiones y operaciones que atenten en contra del bienestar de los consumidores. Conadecus ha declarado la competencia su primera línea de defensa de los consumidores ante los abusos del mercado, ya que esto permite a los consumidores elegir entre varios oferentes y diferentes productos, si estos no se coluden para dominar o repartirse el mercado, los consumidores pueden sentirse conformes y protegidos de los principales abusos.
Las violaciones a la libre competencia y las prácticas depredadoras pueden afectar a algunas empresas y ser víctimas de esas transgresiones, estos casos son los menos, en general, son las empresas las que pueden infringir la libre competencia. La situación de los consumidores es distinta, sólo somos víctimas y nunca victimarios en materia de violaciones a la competencia.
La colusión de las farmacias, Whirpool con Temcuseh Do Brasil o la guerra de los plasmas, entre otras, han marcado a los consumidores en los años recientes, y nos han puesto en alerta permanente, ya que estas infracciones no están consideradas en la Ley del Consumidor y, en consecuencia, los consumidores no tienen manera de demandar con un procedimiento colectivo que involucre a todos los afectados y exigir las devoluciones e indemnizaciones que corresponde a estos casos. Las amenazas para los consumidores tienen que ver, principalmente, con la alta concentración económica y posición dominante de actores del mercado nacional, lo que se traduce en falta de competencia y transparencia del mercado, por esto Conadecus ha entregado opinión cuando ha sido requerida por los organismos pertinentes.
El caso de fusión de LAN-TAM es distinto. Aquí las empresas utilizaron el mecanismo menos transparente, solicitaron un acuerdo directo con la FNE, sin consulta de opinión a quienes tenemos interés legítimo, ya que la fiscalía representó de hecho el interés general, y lo más preocupante, nadie levantó la voz antes de la consulta de Conadecus.
Hoy ya conocemos el fallo del TDLC, en Conadecus consideramos positiva la decisión y las exigencias impuestas y sus alcances por el TDLC para la nueva aerolínea, consideramos un avance significativo la incidencia de los consumidores en la fusión de dos grandes empresas como también un avance en la transparencia en operaciones de este tipo. El fallo del TDLC es un gran triunfo de los consumidores representados por Conadecus, y ha quedado plenamente justificada la consulta y sus fundamentos, además ha sido aclaratoria para quienes hicieron doble lectura y desataron un debate con todo tipo de interpretaciones. Como consecuencia, ha quedado establecido el derecho de Conadecus y las asociaciones de consumidores, de intervenir en los procesos de fusión en representación de los consumidores chilenos.
Articulo publicado en Estrategia On Line.