El municipio de Santiago anunció una nueva estrategia que busca erradicar definitivamente el comercio ambulante y vendedores ilegales: multar a los compradores.
El alcalde Felipe Alessandri explicó la medida que debutó esta semana y que ya ha multado a 12 personas, señalando que “hay que atacar al cliente, porque si no hay nadie que les compre no se van a instalar”.
Esta iniciativa se ampara en una ordenanza que fue impulsada en la gestión de Raúl Alcaino, actualizada por Carolina Tohá, y puesta en práctica por el actual jefe comunal, que castiga a quienes vendan o compren en el comercio no autorizado aludiendo a una alteración del orden público. “Cuando se aglomeran aumentan los robos por sorpresa y se genera una sensación de inseguridad”, agregó Alessandri.
A través del plan “Comercio Justo”, durante el 2017 ya se probó la norma, entregando partes de cortesía a los clientes del comercio ilegal. Ahora, además de cursar multas efectivas, para fortalecer la fiscalización, se duplicarán los inspectores, pasando de 20 a 40, quienes operarán encubiertos y acompañados de carabineros también de civil.
Los operativos se centrarán en el casco histórico, los barrios Meiggs y Franklin, y los Parques O’Higgins, Quinta Normal y Los Reyes. La multa para los clientes puede alcanzar las 3 UTM (142 mil).
El presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios, Hernán Calderón, valoró que la medida fomente las compras en locales establecidos. ya que cuando compramos en el comercio ilegal estamos expuestos a riesgos por productos vencidos o tóxicos, y ante esas eventualidades no tenemos ni una garantía ni protección.
Fuente: La Hora