Son muchos los consumidores que tienen mascotas y que son partes fundamentales de sus familias, normalmente será un perro o un gato.
Es importante considerar el consumo especial de cada mascota.
En medio de una crisis sanitaria por virus asociados a las bajas temperaturas, también debemos resguardar a nuestras mascotas.
Pueden sentir frío y tener resfriados, pero a veces nuestros cuidados para evitar contagios y bajas temperaturas, no son los mismos para las mascotas.
Primero lo primero, los consumidores deben reconocer síntomas de sus mascotas, tirita para generar calor con el movimiento.
También pueden respirar más lento, se encogen y acurrucan para evitar perder temperatura corporal.
Son precisamente las mascotas más pequeñas las que pueden exponerse menos a bajas temperaturas, esto porque pueden perder más rápido el calor.
Especies como tales como el chihuahua, yorkshire y teckel dachshund o salchicha, pueden ser más susceptibles.
Las razas de mayores dimensiones, pero de pelaje corto y poca grasa, como los galgos, pueden sufrir los mismos efectos.
Síntomas
Para reconocer rápidamente síntomas de refriados en las mascotas, debemos fijarnos en tos, estornudos, secreción nasal, pérdida de apetito, ojos llorosos, fiebre y decaimiento.
Por otro lado, los cuadros respiratorios también pueden ser peligrosos, poner especial atención a la nariz seca y caliente, temblores, constante sueño y malestar general.
Resguardos
A algunas de nuestras mascotas les gusta salir, estar en el patio o exterior, aunque a otros también estar sólo dentro de casa, cuando el clima es intenso, es decir, sean bajas las temperaturas, con lluvia o chubascos que tengan altos niveles de humedad.
En dichas condiciones, se debe evitar exponerlos tanto al frío como a los cambios bruscos de temperatura.
A veces, nuestras mascotas, buscan el calor de calefactores, es importante no promocionar cambios abruptos en su temperatura para evitar resfriados.
Si nuestra mascota tiene acceso al exterior, es recomendable que salga en las horas de más calor. Es recomendable apagar la calefacción 10 minutos antes de que salga.
Si vuelve mojado de su salida, es muy importante que lo sequemos completamente, prestando especial atención a las patas, orejas, pecho y abdomen.
Ropa y pelaje
El pelo de nuestras mascotas es su abrigo natural de invierno, se aconseja no realizar cortes demasiados cortos o, dentro de lo posible, no cortarles el pelo.
En caso de que las temperaturas sean muy bajas, se aconseja abrigarlos para salir.
Por último, la cama de nuestra mascota debe ser calentita, cómoda y estar resguardada de corrientes de aire.
También podemos proporcionarle una manta para ayudarle a conservar mejor el calor.
La ropa, en general, no es necesaria mientras tengan su pelaje, aunque sí puede ser beneficiosa en caso de mascotas ancianas y/o con artrosis.
Dieta
Para nuestros amigos de cuatro patas con delicada salud, es recomendable usar suplementos a sus dietas.
Se recomiendan la vitamina E, los ácidos grasos Omega 6 -que dan firmeza al pelaje-, la vitamina A y la vitamina D aumenta los linfocitos T, que refuerzan la inmunidad.
Nuestras mascotas mayores
A esta edad son muy comunes los problemas articulares, como las artrosis a nivel lumbar y problemas respiratorios.
Estas patologías casi siempre empeoran con el frío intenso, pudiendo llegar a impedir que su mascota pueda levantarse solo y caminar.
Estos animales necesitan sin duda estar abrigados en el invierno cuando salen a la calle o si permanecen en un patio.
Además, los animales ancianos no tienen sus defensas en estado óptimo y su energía es menor que cuando son jóvenes, por lo tanto, es muy importante cuidarlos del tiempo frío.
Estos resguardos deben estar sobre todo en la noche, cuando descansan y se quedan muchas horas inactivos.