Noticia | 12 Septiembre 2013

Presidente Nacional de Fedecarne alerta sobre productos mal rotulados


“Se engaña a los consumidores y se les vende carne de vaca como novillo”, dijo Christian Arntz Mac-Evoy.
Una dura crítica al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), así como también a los supermercados, hizo el presidente nacional de la Federación de Productores de Carne (Fedecarne), Christian Arntz Mac-Evoy, por lo que denominó “un engaño a los consumidores chilenos, a quienes se les vende carne de vaca importada como si fuera de novillo”.
El dirigente gremial participó en la reunión de gremios ganaderos realizada en Chillán, y que convocó a dirigentes de distintas regiones del país, donde se analizaron temas como la tipificación de la carne, las normas que se estudia modificar, la débil fiscalización de la carne importada y las restricciones a la exportación al mercado europeo.
Precisamente, ad portas de Fiestas Patrias, en que aumenta considerablemente el consumo de carne en el mercado nacional, surgen atractivas ofertas en los supermercados, donde los precios de las carnes importadas son notoriamente más bajos que los de las carnes nacionales. Es así como en los refrigeradores del retail se pueden observar cortes provenientes de Brasil, Paraguay, Argentina, Uruguay, Estados Unidos y Australia.
“Lo más probable es que esa carne no sea de novillo, sino que sea de vaca. De hecho, si uno busca carne de vaca nacional en una carnicería, la puede encontrar igual de barata, pero será difícil, porque se estigmatiza”, aseguró el productor osornino.
En 2012, en Chile se consumieron 325 mil toneladas de carne bovina. La producción nacional alcanzó a 197 mil toneladas, mientras que las importaciones llegaron a 130 mil toneladas. Las exportaciones, en tanto, fueron 1.902 toneladas.
Explicó que la falta de fiscalización por parte del SAG de la correcta tipificación y rotulación de la carne importada, permite que hoy se comercialice carne tipo “U”, con el rótulo “V”, haciendo creer a los consumidores, que no son expertos, que compraron un producto que no es tal.
La tipificación chilena, que va desde la “V” hasta la “O”, mide edad y cobertura grasa, donde la “V” corresponde a un animal más joven, y por lo tanto, la carne es más blanda.
En ese sentido, si bien no quiso asignar responsabilidades en el engaño, Arntz sostuvo que es un muy buen negocio para el importador comprar carne barata de vaca y venderla como carne de novillo.
“El engaño bien podría producirse en el país de origen, aunque el importador, que puede ser el supermercado, podría ser cómplice del engaño, o incluso, lo que es más grave, podría ocurrir que se esté modificando la rotulación acá en Chile”, sostuvo.
Añadió que para muchos consumidores puede resultar muy conveniente comprar carne brasileña o paraguaya a bajo precio, “porque la encuentran blanda y sabrosa, por la grasa, pero resulta que el viaje de la carne desde esos países hasta Chile permite una maduración, que es un tiempo de guarda que contribuye a ablandar la carne, y nosotros no criticamos eso, ni decimos que sea de inferior calidad, sin embargo, nos parece que debe informarse correctamente a los consumidores”.
En ese sentido, aclaró que los mercados más exigentes, como el europeo, prefieren el novillo, y destacó que la credibilidad de los países es un aspecto importante a considerar, aludiendo a la escasa credibilidad de Brasil y Paraguay.
Tipificación y fiscalización
El dirigente gremial sostuvo que si bien esto está normado, no es debidamente fiscalizado, y reconoció que en ningún gobierno ha existido la voluntad por mejorar la fiscalización, “y se escudan diciendo que es muy difícil hacerlo. Lo que creemos es que se quieren evitar problemas económicos o políticos con los países vecinos”.
Es por ello que el gremio está trabajando, en conjunto con el Instituto Nacional de Normalización (INN), en la definición de una nueva categoría que abarque las carnes sin especificación (SE), de manera que una carne bovina de raza cebú (Bos indicus), que es la que producen Brasil y Paraguay y corresponde al 75% de las importaciones, entre en esta categoría, ya que existe cierto consenso en el sentido de que al cebú no corresponde tipificarlo de acuerdo al sistema chileno.
“Esto ayudará a dar mayor transparencia al mercado, a competir en igualdad de condiciones, a entregar mayor información al consumidor y simplificará el proceso de fiscalización, puesto que cualquier carne cebú que sea tipificada como “V” incurrirá en una violación de la norma, de hecho, nosotros mismos, enviando muestras a un laboratorio, podremos identificar que no se cumple con la norma”, arguyó Arntz, quien es vicepresidente de la Sociedad Agrícola Ganadera Osorno (Sago).
El timonel de los ganaderos fue enfático en afirmar que “esta no es una medida para prohibir la importación de carnes de esos países, sino que es para que los consumidores sepan con claridad qué es lo que están comiendo”.
diarioladiscusion.cl, septiembre, 11, 2013

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